¿Te vas de vacaciones a la playa?
Si te vas de vacaciones, quieres seguir entrenando a pleno rendimiento, y a la vez, disfrutando allá donde vayas, te indicamos cuáles son los mejores entrenamientos. No dejes aparcada tu rutina y adapta tus entrenamientos en la playa.
Si vas aestar de vacaciones en una zona de playa, puedes aprovechar esta maravillosa circunstancia para realizar algunos entrenamientos específicos que no puedes hacer de forma habitual durante todo el año. En la playa se pueden realizar bastantes tipos de entrenamiento:
- Por las dunas: trotar por la zona de dunas de la playa, donde la arena esta más seca y suelta, puede llegar a ser un entrenamiento muy exigente a nivel muscular, por lo que es recomendable no abusar de su duración, no más del 50% de una sesión y no más de un par de veces por semana. Se puede correr conzapatillas y se pueden realizar tanto trotes continuados como pequeñas repeticiones en progresión, como si de un entrenamiento en cuestas se tratase.
- En el agua: correr por el agua, hasta media pierna, puede llegar a ser un entrenamiento fenomenal para trabajar la potencia del tren inferior y, por el bien de tus zapatillas, es aconsejable realizarlo descalzo. La duración del entrenamiento debe ser inferior a la de una sesión normal, evitando exceder del 40% y limitando el entrenamiento a dos días por semana.
- Por la orilla:correr por la línea de la playa húmeda y dura es un excelente entrenamiento de propiocepción. Correr descalzo por la arena dura de la orilla mejorará tus sensaciones de impulso en la planta del pie. La duración del entrenamiento puede equivaler a un 60%-70% de una sesión de carrera continua ordinaria, y tampoco es conveniente hacerlo más de dos días a la semana ya que la musculatura se resentirá en mayor grado que en los entrenamientos convencionales
¿Te vas de vacaciones a la montaña?
Si te vas de vacaciones, quieres seguir entrenando a pleno rendimiento, y a la vez, disfrutando allá donde vayas, te indicamos cuáles son los mejores entrenamientos. No dejes aparcada tu rutina y adapta tus entrenamientos en la montaña.
Si nunca has entrenado en montaña, la experiencia de correr por estas zonas puede llegar a ser bastante gratificante. Procura correr con un calzado adecuado de trail-running que ofrezca buena protección. A la hora de correr por montaña disponemos de dos grandes alternativas:
- Senderos y caminos:en zonas forestales o carreteras de montaña, intenta buscar caminos ascendentes y corre con suavidad, en progresión y cómo no, disfrutando del paisaje. Por estos senderos puedes probar a realizar entrenamientos de cambios de ritmo, pero ten en cuenta que el ritmo en montaña es bastante más inferior que en llano. Verás como después del entrenamiento te sentirás con un extra de oxígeno y glóbulos rojos.
- Zonas técnicas:salirse de los caminos habituales, hacer campo a través, correr por zonas abruptas entre las piedras, con diferente inclinación y en tramos no señalizados, en definitiva, las zonas en las que sería complicado mantener la misma longitud de zancada son las consideradas zonas técnicas. Es un entrenamiento exigente que requiere de una cierta habilidad pero que se puede realizar si se toman las debidas precauciones. Te recomendamos que primero pruebes por tramos ascendentes, los tramos de bajada mejor déjalos para los especialistas, pues son muy lesivos y te pueden dejar “tocado” muscularmente durante un tiempo.